Este lunes 16 de septiembre comenzaron las tareas de caracterización y estudios de la zona coordinadas con el Departamento General de Irrigación, YPF, el Laboratorio de la Universidad Nacional de Cuyo y la Dirección de Protección Ambiental (DPA).
El Ministerio de Energía y Ambiente e Irrigación ordenarán una serie de medidas que deberá tomar YPF. La empresa comenzó a realizar los labores de caracterización -realización de calicatas en el perímetro del pasivo detectado- para la toma de muestras y estudios de esas tierras. A la vez, desde la DPA se le solicita a YPF la realización de trabajos de prospección no invasiva en la zona (geoeléctrica), a fin de tener mapas actualizados del subsuelo e identificar si existen más pasivos.
La Dirección de Protección Ambiental e Irrigación coordinaron un plan de acciones conjuntas notificando a YPF para abordar la situación del pasivo ambiental de hidrocarburos hallado en Cruz de Piedra, en la margen Norte del río Mendoza.
Esta acción responde a la reciente identificación de restos de hidrocarburos en el área, en cumplimiento con la Ley 5961/92 sobre preservación del ambiente en todo el territorio de la provincia de Mendoza, cuyo objetivo es resguardar el equilibrio ecológico y el desarrollo sustentable. Cabe destacar que YPF ya se encuentra realizando desde hace algunos días trabajos en la zona.
De esta forma, ha dado inicio a una serie de trabajos en la zona, que incluyen calicatas. “La calicata permite realizar prospecciones no invasivas para explorar todo el territorio, con perforaciones para toma de muestra de tierra y agua”, explicó el director de Protección Ambiental, Leonardo Fernández.
El lunes 16 de septiembre comenzaron las tareas de caracterización y estudios de la zona coordinadas con el Departamento General de Irrigación, YPF, el Laboratorio de la Universidad Nacional de Cuyo y la Dirección de Protección Ambiental.
Asimismo, se solicitó también a YPF una serie de acciones que deberá cumplir: ampliar los estudios para garantizar que no queden pasivos enterrados no identificados; implementar un sistema de monitoreo de ductos y un plan de mantenimiento preventivo para evitar futuras fugas o derrames y realizar un seguimiento exhaustivo para prevenir y minimizar impactos ambientales.
El Departamento General de Irrigación ha implementado programas de monitoreo para evaluar la calidad de los cauces circundantes a la zona afectada, mientras se ejecutan las tareas de caraterización y remediación.
Sobre el pasivo ambiental
El 5 de septiembre de 2024, se realizó una inspección en la zona reportada, donde se observaron piedras y tierras con restos de hidrocarburos. La empresa YPF fue informada de la situación y se solicitó la remoción manual de estas piedras y la colocación de barreras oleofílicas, que contienen, absorben y aíslan líquidos peligrosos.
Además, se requirió que YPF presentará un plan de trabajo para caracterizar la zona y determinar si existía un pasivo ambiental significativo.
La empresa YPF ha propuesto un plan de acción, que incluye:
Un estudio de caracterización de la nueva situación ambiental.
Un análisis cuantitativo de riesgo (ACR) tras obtener los resultados analíticos.
Medidas de remediación basadas en los resultados del ACR.
Dado que la zona está en una región de alta sensibilidad y en un sector que puede ser inundado ante eventuales crecidas del río Mendoza, se han solicitado acciones de remediación urgentes para minimizar el impacto ambiental.